Nuestros tréboles blancos y rojos cumplen la función de cobertor vivo del suelo, evitando así la erosión y el resecamiento, cuidando los microorganismos que viven en constante humedad, pero también fijan nitrógeno de la atmosfera, brindando así constante Nitrógeno orgánico, sus raíces remueven la tierra manteniéndola aireada para una mejor absorción de agua, y a su vez se asocian con las micorrizas, estos microorganismos ayudan muchísimo al desarrollo de la raíz y a la absorción de líquidos y nutrientes de las plantas.
La utilizaremos esparciendo 15 g de semillas en 1 m² y enterrándolas 1 cm.
Nuestros tréboles blancos y rojos cumplen la función de cobertor vivo del suelo, evitando así la erosión y el resecamiento, cuidando los microorganismos que viven en constante humedad, pero también fijan nitrógeno de la atmosfera, brindando así constante Nitrógeno orgánico, sus raíces remueven la tierra manteniéndola aireada para una mejor absorción de agua, y a su vez se asocian con las micorrizas, estos microorganismos ayudan muchísimo al desarrollo de la raíz y a la absorción de líquidos y nutrientes de las plantas.
La utilizaremos esparciendo 15 g de semillas en 1 m² y enterrándolas 1 cm.